Las abundantes lluvias invernales asociadas al fenómeno de El Niño han mejorado las condiciones hídricas en los valles vitivinícolas chilenos mejoraron notablemente respecto al año pasado, anticipando un incremento en la producción de uva de entre un 10% y un 20% para la vendimia de 2025.
Según el primer informe de la temporada elaborado por la Asociación Nacional de Ingenieros Agrónomos Enólogos de Chile (ANIAE) para la Oficina de Estudios y Políticas Agrarias (ODEPA) -el informe completo haciendo clic acá–, las precipitaciones invernales y las temperaturas primaverales más altas de lo habitual han favorecido el desarrollo fenológico de las vides en la mayoría de los valles vitivinícolas del país.
En el Valle del Limarí, por ejemplo, se registró un aumento de más del 550% en las precipitaciones en comparación con la temporada anterior, lo que ha revitalizado una zona afectada por la sequía.
En el Valle de Casablanca, la escasa presencia de heladas primaverales sugiere que la producción de variedades como Pinot Noir, Chardonnay, Sauvignon Blanc y Syrah será similar o superior a la de la temporada pasada.
En el Valle del Maipo, las precipitaciones invernales superaron el promedio de los 11 años anteriores, registrando un superávit histórico.
Esto ha mejorado la acumulación de agua en el suelo y los caudales de ríos, augurando un inicio prometedor para las vides.
Sin embargo, en Isla de Maipo, el aumento del caudal del río Maipo afectó a 12 hectáreas de vides.
A pesar de estas condiciones favorables, se prevén disminuciones en el rendimiento de hasta un 30% en variedades como Cabernet Sauvignon y Merlot en el Valle del Maipo, y en Sauvignon Blanc y Merlot en el Valle de Cachapoal.
En este último, las temperaturas medias mensuales de primavera han sido notablemente más altas que en la temporada anterior, registrando una diferencia promedio de temperaturas máximas de 4,2 °C durante noviembre, particularmente en Peumo.

El informe de ANIAE, basado en encuestas realizadas en noviembre de 2024 a viticultores y enólogos de todos los valles vitivinícolas de Chile, destaca que las condiciones agroclimáticas derivadas de El Niño han sido mayoritariamente positivas para la vendimia 2025.
De acuerdo a esas mismas encuestas, el escenario de la próxima vendimia en Chile es mayoritariamente positivo –una cosecha entre 10% y 20% superior a la de 2024 que fue de 80 millones de kilos de uva- debido a condiciones agroclimáticas favorables derivadas del fenómeno El Niño.
No obstante, se subraya la importancia de monitorear continuamente las variables climáticas y su impacto en la producción vitivinícola, considerando las variaciones que pueden presentarse en diferentes regiones y variedades.
En resumen, el fenómeno de El Niño ha proporcionado un impulso significativo a la vitivinicultura chilena, mejorando las condiciones hídricas y climáticas para la vendimia de 2025.
Sin embargo, es esencial mantener una vigilancia constante sobre las condiciones agroclimáticas para asegurar una producción óptima y de calidad en los diversos valles vitivinícolas del país.