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La emblemática destilería de Islay, Bruichladdich -la primera B Corp-, anunció que rediseñó el envase de vidrio color celeste eliminando, la lata y bajando el peso de la botella en un 32%. ¿Se sumarán otras bebidas premium?

Cuando se trata de reducir las emisiones de CO2, las destilerías de whisky no pueden ignorar la necesidad de tomar medidas. Lo mismo sucede con otros productos premium como el de otras espirituosas y los vinos de alta gama, marcas importantes de compañías que podrían ser un poco más serias y tomar medidas obvias para la reducción del peso de sus envases de vidrio.

La reconocida destilería de Islay, Bruichladdich tomó nota acerca de las preocupaciones de los consumidores que los eligen y se tomó el trabajo de rediseñar la botella de The Classic Laddie, el whisky más popular de la gama de productos más reconocidas de los escoceses del Oeste.

Si bien los clientes ya tenían la opción de optar por un embalaje secundario adicional al comprar su The Classic Laddie, la lata ya no se utilizará en el futuro. Su producción provoca 1 kg de CO2, informa Bruichladdich.

Ahora la destilería de Islay, Bruichladdich, ha rediseñado su emblemática The Classic Laddie, eliminando la lata secundaria y reduciendo significativamente el peso del vidrio para reducir las emisiones de CO2 del envase en un 65%.

El nuevo diseño es un 32% más ligero que la botella anterior y contiene un 60% de vidrio reciclado, lo que permite transportar más botellas por paladar.

«Como industria, nos hemos acostumbrado a creer que el whisky escocés de malta debe venir con un envase exterior de serie», afirma Douglas Taylor, director ejecutivo de la destilería Bruichladdich.

«Mientras que la mayoría de las bebidas espirituosas viajan por todo el mundo en la botella, la mayoría de los whiskies de malta llevan un envase exterior secundario muy elaborado o pesado. Y nos preguntamos por qué. El envase secundario no siempre es necesario y, desde luego, no es sostenible.

«La nueva botella propia Classic Laddie supone un cambio significativo para Bruichladdich. Es mucho más que un rediseño de la botella. Está cambiando la trayectoria de la marca y la forma en que operamos como empresa basada en valores».

La botella rediseñada ya se puede comprar online en bruichladdich.com y en tiendas de todo el Reino Unido y aeropuertos internacionales, a un precio de 45 libras, aproximadamente unos 60 dólares estadounidenses.


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