Con mucha y muy buena comunicación poco a poco ganan espacio entre los consumidores que parecen resistir frente a los cambios en el consumo. Las grandes empresas de bebidas están apostando por el crecimiento del segmento de no-alcohol y bajo alcohol, en un mercado que promete alcanzar cifras sin precedentes en los próximos años.
La industria de las bebidas está experimentando una transformación significativa con la creciente demanda de productos no-alcohólicos y de bajo contenido alcohólico.
El crecimiento de las bebidas sin alcohol es una tendencia que no muestra señales de desaceleración. A medida que más consumidores buscan opciones que les permitan disfrutar de la vida social sin el efecto del alcohol, los gigantes de la industria están respondiendo con inversiones estratégicas y la creación de productos innovadores.
La proyección de crecimiento en este segmento no solo refleja un cambio en las preferencias del consumidor producto de la fuerte campaña europea en contra del consumo de alcohol, sino que también representa una oportunidad significativa para las empresas que pueden adaptarse y evolucionar en un mercado en constante cambio.
Con un enfoque claro en la sostenibilidad y la responsabilidad social, el futuro de las bebidas sin alcohol parece prometedor.
Claro, es muy importante destacar que este segmento todavía representa una pequeña parte del mercado global de bebidas alcohólicas, las proyecciones indican que su valor alcanzará los U$S 11.6 mil millones para 2027, con un crecimiento aproximado del 16% respecto a las proyecciones para 2024, según un análisis reciente de GlobalData.
Crecimiento en el Segmento No-Alcohólico
El mercado de los espíritus no alcohólicos, aunque más pequeño, se prevé que crezca aún más, con un aumento del 36.7% en valor entre 2024 y 2028, alcanzando un total de U$S 478.9 millones.
Este crecimiento ha llamado la atención de los grandes actores de la industria de las bebidas, quienes están haciendo movimientos para posicionarse en este espacio. Las estrategias incluyen fusiones y adquisiciones (M&A), desarrollo de extensiones de marca y el lanzamiento de productos no alcohólicos independientes.
Empresas como Asahi Group Holdings están liderando la carga. La compañía japonesa ha establecido un objetivo de que el 20% de su portfolio esté compuesto por productos no alcohólicos y de bajo alcohol para 2030.
A finales de 2024, estos productos representaron el 12.1% de sus ventas totales. En enero de 2024, Asahi participó en una ronda de financiación para The Zero Proof, un minorista estadounidense de bebidas no alcohólicas, lo que marca su intento de aumentar su inversión en el sector.
Innovaciones de Diageo
Diageo, otro gigante del sector, ha realizado inversiones significativas en sus extensiones de marca no alcohólica. Desde el lanzamiento de variantes sin alcohol de marcas icónicas como Captain Morgan y Guinness, la empresa no ha establecido objetivos de ventas específicos, pero ha manifestado su compromiso con ofrecer opciones a los consumidores que buscan moderar su consumo de alcohol.
En 2023, Diageo anunció una inversión de € 25 millones para aumentar la capacidad de producción de su Guinness sin alcohol, con planes para que este producto represente el 10% de las ventas totales de Guinness en Irlanda en los próximos años.
Además, Diageo ha estado involucrado en adquisiciones importantes en el ámbito de los espíritus no alcohólicos, como la compra de Ritual Zero Proof, un grupo estadounidense de espíritus no alcohólicos. Esta estrategia se alinea con la tendencia de adquirir marcas de alto crecimiento en categorías emocionantes.
Movimientos de Pernod Ricard
Pernod Ricard también ha estado activo en este espacio, con una variedad de marcas y extensiones no alcohólicas en su portafolio. La compañía ha estado invirtiendo en alternativas de bebidas espirituosas a base de agave y ha realizado una inversión en la marca Almave, un espíritu agave sin alcohol respaldado por Lewis Hamilton.
Este interés por el mercado no alcohólico es parte de una tendencia más amplia de las empresas de bebidas para adaptarse a los cambios en los hábitos de consumo.
Anheuser-Busch InBev y su Estrategia de No-Alcohol
Anheuser-Busch InBev ha aumentado su cartera de productos sin alcohol en un 60% desde 2019. Aunque la empresa no ha establecido metas específicas de crecimiento en este segmento, ha indicado que prevé que los productos sin alcohol representen el 20% de sus ventas globales para 2025. Sin embargo, informes recientes sugieren que la compañía podría no alcanzar este objetivo.
A pesar de esto, la empresa continúa expandiendo su tecnología de desalcoholización y se ha comprometido a patrocinar los Juegos Olímpicos con su marca Corona Cero.
La Visión de Campari y Bacardi
Campari Group ha intensificado su enfoque en las bebidas sin alcohol, destacando su aperitivo Crodino y su marca independiente The Notes. La compañía ve este segmento como una parte clave de su estrategia para atraer a nuevos consumidores y adaptarse a las dinámicas sociales.
Por su parte, Bacardi ha lanzado su gama de Martini sin alcohol y está explorando la posibilidad de desarrollar más productos en este espacio, aunque no ha establecido metas específicas.
La Iniciativa de Molson Coors y LVMH
Molson Coors está escalando su portafolio de Beyond Beer, que incluye cervezas sin alcohol y cócteles listos para beber. La compañía ha anunciado una asociación con la marca australiana Naked Life para lanzar cócteles sin alcohol en EE.UU. en 2025.
Al mismo tiempo, los franceses de LVMH han comenzado a explorar el mercado de vinos no alcohólicos con su inversión en French Bloom, una marca de vino espumoso sin alcohol.
Nuevos Lanzamientos y Tendencias
Con el lanzamiento reciente de productos como Casillero del Diablo Zero de Concha y Toro, la industria está respondiendo a la creciente demanda de opciones no alcohólicas.
La bodega chilena ha dedicado un año al desarrollo de este producto, que utiliza uvas Chardonnay de su viñedo en el Valle Central de Chile. La compañía prevé la expansión de este producto a otros mercados en 2025, lo que subraya el interés general por las bebidas que ofrecen opciones de moderación.
En Argentina, lo más serio viene del renacer de la cerveza 0,0%
Mientras que lo hecho por la industria del vino no solo no es representativo sino, además, no es de la calidad que se puede esperar de un producto que se llame «vino argentino», lo presentado recientemente en Pro Wine Alemania no merece ni siquiera ser mencionado.
Todo lo contrario que sucedió con la cerveza. A pesar de la disminución de más del 20% en las ventas de cervezas tradicionales, el segmento de cervezas 0,0 está experimentando un resurgimiento en Argentina. Este fenómeno se debe a la innovación en productos tanto por parte de grandes industrias como de cervecerías artesanales, así como a un cambio en los hábitos de consumo de los consumidores que buscan opciones sin alcohol para momentos específicos, como almuerzos laborales o antes de conducir.
Aunque actualmente representa un porcentaje pequeño del mercado, este nicho ha más que duplicado sus ventas y ya constituye el 1% del total de las ventas de cervezas en el país. Esta tendencia contrasta con la situación del mercado general, que ha visto una caída en el consumo debido a la disminución del poder adquisitivo. En particular, el sector de bebidas alcohólicas ha sufrido una contracción significativa, siendo el área más afectada por los recortes en los gastos de los hogares argentinos.
Según datos de la consultora Scentia, las ventas acumuladas de bebidas alcohólicas han caído un 18,6% en los primeros nueve meses del año, casi el doble de la contracción promedio del consumo general, que es del 11,9%.
Este panorama muestra cómo las cervezas sin alcohol están ganando terreno en un contexto donde los consumidores buscan alternativas más saludables y responsables. La industria está respondiendo a esta demanda con productos que no solo cumplen con las expectativas de sabor, sino que también se alinean con un estilo de vida más consciente.