La industria vitivinícola Argentina pasa por uno de sus peores momentos. Exportó 49,27 millones de litros de vinos, entre fraccionados y a granel, por un valor total de U$ 166,70 millones. Una retracción del 24,12% en volumen y del 11% en facturación.
Más allá de la infinita crisis de la economía argentina, desde hace por lo menos 50 años, la crisis actual de la industria vitivinícola local no sorprende a los analistas que en los últimos años observaron críticamente la conducta de la dirigencia «política» de la industria que se dedico más a engrandecer proyectos e intereses personales y no los de la industria en general.
Más allá de las sequías, de los problemas con el cambio, con las exportaciones, con una dirigencia de escasa capacidad para la promoción y el comercio internacional, era de prever que las exportaciones totales de vinos de Argentina -estancadas en menos de U$ 1.000 millones anuales desde hace más de 10 años- tarde o temprano mostrarían una fuerte caída en volumen además de la significativa caída de la facturación.
Según datos del Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV), relevados por el Observatorio Vitivinícola Argentino, las exportaciones totales de vinos (fraccionados y a granel) en los tres primeros meses de 2023 alcanzan los 49,27 millones de litros por un valor total de U$S166,70 millones.
Esto marca una baja del 24,12% en comparación con los 64,94 millones de litros exportados en el primer trimestre del 2022, con una caída del 11% contra los U$S187,28 millones facturados en este período hace un año.
En el desagregado por mes, salvo en enero de 2023 donde la facturación por exportaciones totales de vinos crece en la comparación contra igual período de 2022, en todos los demás meses hay caídas tanto en dólares como en litros exportados.
En el análisis específico de las exportaciones de vinos fraccionados, en el acumulado de los tres primeros meses de 2023 se vendieron al exterior 37,99 millones de litros por un valor total de U$S155,56 millones. Esto marca una caída del 16,28% en volumen y del 8,96% en facturación, otra vez la baja en cantidad es muy superior a la retracción en la facturación por exportaciones.
Que la caída en volumen sea significativamente mayor a la baja en la facturación por exportaciones de vinos fraccionados en la comparación interanual al primer trimestre del 2023 se debe a que los precios de venta fueron al alza.
En los tres primeros meses de 2022 el precio promedio en dólares por litro de vino fraccionado exportado fue de un piso de 3,66 dólares por litro a un máximo de 3,85 dólares por litro. En los tres primeros meses de 2023, en cambio, los precios subieron de escalón y se ubicaron en 4,06 dólares por litro como piso a un máximo de 4,12 dólares por litro. En un año se saltó de los 3 dólares a los 4 dólares por litro exportador en valor promedio.
En cuanto a los destinos del vino fraccionado que exportó Argentina en el acumulado al primer trimestre de 2023, Estados Unidos con el 29,19% del total se ubica como el principal destino por lejos en facturación (U$S). En segundo lugar, está Brasil con el 13,72%, seguido de Reino Unido con el 11,08%.
Por variedades de vinos exportadas en volumen (litros), el Malbec lidera ampliamente con el 59,26% de las exportaciones totales. Casi 6 de cada 10 litros de vinos fraccionados que exportó Argentina en el primer trimestre del 2023 son Malbec.
En segundo lugar, en volumen exportado se ubica el Cabernet Sauvignon con el 11,86% del total y en tercera posición están los vinos Sin Mención Varietal con el 11,05%.
Fuente: Observatorio Vitivinícola