Un nuevo estudio publicado en la revista Food Quality and Preference sugiere que es más probable que las personas digan que disfrutan de un vino en particular si les dicen que es caro, independientemente de su precio real. Otro estudio realizado por dos científicos asegura que los vinos orgánicos “tienen mejor sabor”.
Aunque la conclusión científica suene bastante lógica, no deja de ser interesante el estudio, denominado “La información de precios influye en la experiencia subjetiva del vino: un experimento de campo enmarcado” y publicado en la revista Food Quality and Preference, informó recientemente sus hallazgos sobre la posibilidad de que la percepción del vino barato pudiera verse alterada.
En un evento de degustación celebrado en la Universidad de Basilea en Suiza, los psicólogos alteraron los precios de los vinos de su costo real.
A 140 catadores ciegos se les entregaron tres versiones del vino tinto italiano de 2013, cada una etiquetada como “precio bajo, medio o alto”, y los costos oscilan entre 10 euros y 70 euros por botella.
Algunos vinos presentados no tenían etiqueta de precio, mientras que otros figuraban con su precio real de góndola.
Los investigadores encontraron que cuando a los catadores ciegos se les dio un vino más barato que les dijeron que era cuatro veces más caro que su costo real, calificaron la bebida como más “agradable” que la botella real más costosa.
“El vino más barato se calificó como más agradable cuando se presentó como cuatro veces su precio minorista real”, señalaron los psicólogos en el estudio. “No se encontró ningún efecto cuando se redujo cuatro veces la etiqueta de precio del vino caro”, explicaron en el estudio.
“Por lo tanto, en el vino puede estar la verdad, pero su experiencia subjetiva también puede estar en el precio” concluye en una parte el estudio aunque, a ciencia cierta, suena extremadamente lógico.
Sin embargo, como dijo la crítica de vinos de The Times, Jane MacQuitty, la cata de vinos es un negocio complejo que requiere años de capacitación. Entonces, escribió, no debería sorprendernos que los catadores novatos utilizados en este estudio calificaran a un “Montepulciano d’Abruzzo simple y afrutado antes que a un dúo más austero y burdeos”.
Los vinos orgánicos califican cada vez mejor
Mientras tanto, un estudio de 200.000 puntuaciones de vino mostró que los vinos orgánicos “tienen mejor sabor”.
Magali Delmas, profesora del Instituto de Medio Ambiente y Sostenibilidad de UCLA, y Olivier Gergaud, profesor de Economía en la KEDGE Business School en Burdeos, publicaron por primera vez un estudio en 2016 que analizaba las puntuaciones de los vinos producidos a partir de uvas orgánicas en California.
La pareja analizó los puntajes de 74,000 vinos calificados por Robert Parker , Wine Enthusiast y Wine Spectator , y encontraron que los críticos calificaron los vinos de California orgánicos con etiqueta ecológica un 4.1% más altos que los vinos convencionales, aquellos no certificados por una organización externa como orgánicos o biodinámico.
En febrero de 2021, la pareja publicó los resultados de un segundo estudio en la revista Ecological Economics , esta vez analizando 128,000 vinos producidos en Francia, y nuevamente encontraron que los certificados orgánicos o biodinámicos obtuvieron puntajes más altos.
En este estudio, se recopilaron y analizaron las puntuaciones de Gault Millau, Gilbert Gaillard y Bettane Desseauve, que puntuaron los vinos certificados por terceros con un promedio de 6.2% más alto que los que tenían una etiqueta orgánica propia. Los vinos que fueron certificados como biodinámicos por la asociación de terceros se desempeñaron aún mejor, obteniendo una puntuación un 11,8% más alta.
Lo que ha encontrado el estudio de Delmas y Gergaud es que también hay un marcado aumento en la calidad de los vinos producidos con uvas orgánicas o de cultivo biodinámico basado en la evaluación de los críticos de vino, que si bien es reconocido entre los enólogos, no necesariamente se ha comunicado de manera efectiva a los consumidores.
