La D.O. Rías Baixas alcanzó ventas récord en Estados Unidos por U$S 25,8 millones y casi 3 millones de litros, consolidando al Albariño como “la nueva cara del vino blanco español” en el principal mercado de exportación de la región. En Argentina se afirma su producción y ya se exporta.
La D.O. Rías Baixas, cuna del Albariño, acaba de firmar una campaña histórica en Estados Unidos, su mercado de exportación número uno. Las ventas anuales alcanzaron los U$S 25,8 millones entre el 1 de septiembre de 2024 y el 31 de agosto de 2025, lo que supone un crecimiento del 1,6% en valor frente al ejercicio anterior. En volumen, los envíos llegaron a 2,925 millones de litros, un aumento del 2,6%, y ya representan el 34% de todas las exportaciones de Albariño de Rías Baixas en el mundo.
Precios a la baja, apoyo a los importadores
El dato llamativo es que este récord se logra en un contexto de ajuste de precios. El precio medio por litro descendió un 1%, al pasar de 7,99 € a 7,91 € ex cellar entre septiembre de 2024 y agosto de 2025. Desde el Consejo Regulador explican que esta rebaja “refleja el compromiso de la región con apoyar a sus socios globales ante presiones económicas como los aranceles”.
Pese al ligero descenso en el precio medio, el valor total creció, lo que confirma una demanda sólida por los vinos de Rías Baixas en el canal estadounidense. Según los analistas de la denominación, el desempeño se apoya en la “reconocida calidad constante y la alta demanda de vinos de Albariño” por parte del trade y los consumidores.
El Albariño, “la nueva cara del blanco español”
La consolidación de Rías Baixas en Estados Unidos se apoya en una narrativa clara: el Albariño como emblema moderno del vino blanco español. “Albariño encarna la nueva cara del vino blanco español: fresco, expresivo y marcado por el terruño”, aseguró Robustiano Fariña, propietario de la bodega Attis, en declaraciones a the drinks business.
Fariña subrayó también la versatilidad de la variedad: “Albariño es extremadamente versátil y puede dar desde vinos jóvenes y vibrantes hasta etiquetas serias, con capacidad de guarda, y su adaptabilidad al cambio climático le da una verdadera longevidad como la variedad blanca ‘heroína’ de España”. Entre 2012 y 2022, Attis multiplicó por diez su producción de Albariño, pasando de 30.000 a 300.000 botellas anuales, y planea crecer otro 10% en 2026.
Vinos de Colección y apuesta por el valor
La D.O. atribuye buena parte del éxito al desarrollo del escalón cualitativo Vinos de Colección, pensado para mostrar el potencial del Albariño más allá de las versiones jóvenes. Bajo esta categoría se agrupan vinos con crianza sobre lías de entre 6 meses y 5 años, cuvées de viñedo único, ensayos con contacto de madera y expresiones espumosas elaboradas por método tradicional.
Para Eva Minguez, directora de marketing de la D.O. Rías Baixas, las cifras reflejan un crecimiento sostenido más allá del mercado estadounidense. “Las ventas totales de exportación crecieron un 6,82% en volumen y un 7,2% en valor este año respecto a la campaña 2023/24”, afirmó. “Prevemos que 2026 será un año emocionante”, añadió, reforzando la sensación de ciclo expansivo para la denominación.
Pequeños productores, impacto global
El músculo exportador de Rías Baixas se apoya en una estructura marcadamente atomizada: el Consejo Regulador destaca que unos 4.960 viticultores cultivan 4.808 hectáreas, lo que implica menos de 1 hectárea por productor de promedio. “Felicitaciones a nuestros 4.960 viticultores que vendimiaron a mano 4.808 hectáreas de viñedo”, subrayó la D.O. en su balance oficial.
A escala global, las exportaciones de la región crecieron un 6,8% en volumen y un 7,2% en valor en el último ejercicio, con más de dos tercios de las 161 bodegas dedicadas a los mercados internacionales. Muchas de ellas son pequeñas empresas familiares, donde las ventas externas resultan claves para sostener el entramado económico local en Galicia.
Más Albariño, más burbujas, más EE.UU.
De cara a 2026, la D.O. Rías Baixas redoblará su presencia en Estados Unidos con la cuarta edición del Rías Baixas Roadshow, una gira multiciudad prevista para abril de 2025 con más de 20 bodegueros presentando nuevas añadas y partidas limitadas directamente a profesionales y consumidores.
El futuro también pasa por las burbujas. “Varias bodegas están elaborando Albariños espumosos mediante el método tradicional: una expresión absolutamente deliciosa de la variedad”, apuntó Minguez. En paralelo, voces como la de Cristina Domínguez, responsable de exportaciones de Bodegas Granbazán, remarcan el contexto favorable: la bodega registró una “cosecha abundante”, lo que les da margen para 2026 “manteniendo un control muy estricto en la selección de parcelas” para las gamas altas.
Con 25 años de crecimiento continuo en Estados Unidos y un posicionamiento cada vez más sólido en el segmento blanco premium, Rías Baixas se consolida como referencia mundial junto a regiones como Francia y Nueva Zelanda, pero con acento atlántico y sello de Albariño.
Albariño en Argentina
La superficie implantada con Albariño en el país al 2022 asciende a un total 11,2 ha. Mendoza es la región con más hectáreas cultivadas con 7,2 ha, seguida por Buenos Aires 2,5 ha, Salta 0,8 ha, Córdoba 0,6 ha y Entre Ríos 0,2 ha. La producción total en 2022 ascendió a 692,6 qq.
Mercado Interno: en 2022 se comercializaron 129,4 hl.
Mercado Externo: en 2022 este varietal exportó 38,9 hl a 8 países. Los principales destinos: Reino Unido, Brasil y Estados Unidos. El precio medio de este varietal fue de 7,2 U$S/litro, muy superior al de otros varietales.
Dentro del mapa del Albariño argentino, el proyecto Costa & Pampa de Bodega Trapiche merece una mención especial por su rol pionero y su impacto en la percepción de la cepa. El Albariño de Costa & Pampa -ha logrado una muy alta puntuación de los críticos internacionales-, elaborado en la zona de Chapadmalal, cerca de Mar del Plata, fue uno de los primeros en mostrar con claridad el potencial de la variedad en clima marítimo frío, con vinos de acidez filosa, frescura marcada y fuerte identidad atlántica.
Este vino se ha convertido en una referencia tanto para el público como para la crítica, y suele citarse como caso emblemático cuando se habla del “nuevo Albariño del Nuevo Mundo”, consolidando a la costa bonaerense como uno de los territorios más interesantes para blancos de alta gama en Argentina.
