Negocios Liquidos

No es una herramienta exclusiva para coleccionistas de botellas de un millón de dólares, es la tecnología que estaban esperando miles de distribuidores de whisky añejo. A partir de este sistema conocido como Everledger, se podrá seguir la vida de productos cada vez más populares y caros que necesitan de una verificación inmediata para evitar fraudes y falsificaciones. Ya se lanzó un whiskys con sistema anti-fraude.

Everledger, una compañía de blockchain con sede en Londres, se ha asociado con el Centro de Investigación Ambiental de las Universidades Escocesas (SUERC) de la Universidad de Glasgow para producir el primer servicio de verificación de edad para el whisky, según el medio especializado The Spirits Business .

En 2018, las ventas de whisky escocés de malta alcanzaron los 76,6 millones de dólares, pero la SUERC predice que alrededor del 40% de estos whiskies eran falsos. En el mismo año, el equipo probó 55 botellas de whisky y descubrió que 21 eran falsas o no destilados del año indicado en la etiqueta.

La economía del Reino Unido pierde algo menos de 294 millones de dólares cada año gracias a la entrada al mercado de vinos y licores falsificados, según un informe reciente de la Oficina de Propiedad Intelectual de la Unión Europea (EUIPO). A finales de 2016, se retiraron del mercado botellas falsas de whisky escocés por un valor cercano a un millón de libras esterlinas en lo que un corredor denominó “es apenas la punta del iceberg”.

Con las cientos de miles de botellas individuales que se venden por miles de dólares en subastas, la necesidad de probar la legitimidad de un producto de esas características es cada vez más buscado por compradores y también vendedores. La SUERC ya cuenta con los elementos y la tecnología necesaria y espera hacer estas pruebas a través de la datación por radiocarbono que de ahora en más permitirá establecer el año en el que se destiló un whisky.

Al recolectar muestras de whiskies añejos, SUERC ha establecido una curva de datación por radiocarbono que puede detectar la edad de un whisky en unos pocos años. El equipo puede probar nuevos spirits extrayendo una pequeña muestra a través del corcho, después de lo cual se puede aplicar un tapón de botella Everledger anti-manipulación. Esto se combina con una etiqueta que crea una identidad digital para el whisky y carga la información por el sistema blockchain de Everledger a través de etiquetas de comunicación de campo cercano.

Aunque suene casi casi a ciencia ficción, con este sistema, la botella ya se puede rastrear con un smartphone y desde el aparato poder seguir todo su ciclo de vida. Aunque parezca una herramienta de lujo, este sistema ayudará a los productores a proteger sus productos contra las falsificaciones pero también creará un gigantesco y permanente registro digital de todos los whiskies añejos reconocidos.

Para un mundo donde un whisky escocés ya superó el millón de dólares y donde existen falsificaciones de esa misma botella por 10.000 o 50.000 dólares, no son pocos los que festejan poder contar con nuevas tecnologías que protejan a consumidores y compradores de whisky añejo.

Un whisky anti-fraude

Ailsa Bay, la marca de whisky escocés premium de WG & S, se ha asociado con la compañía de tecnología blockchain arc-net para lanzar una gama de whiskies que “capturan el proceso completo de destilación y fabricación, permitiendo a los clientes rastrear su whisky desde la fuente hasta la tienda; garantizando la autenticidad y la trazabilidad “.

Ailsa Bay se somete a una micro-maduración en pequeñas barricas de whisky Hudson. La destilería recopila datos de las fuentes de datos existentes de la empresa matriz William Grant & Sons, incluidos los tipos de barriles, las fechas de llenado y las fechas de embotellado, lo que permite a los consumidores rastrear los componentes individuales del whisky y protegerse contra falsificaciones.