Negocios Liquidos

El vino es un tema serio en la Unión Europea. La Comisión Europea ha decidido este jueves -28 de enero- ampliar las medidas excepcionales de apoyo al sector del vino por un año más, hasta el 15 de octubre de 2021 y con carácter retroactivo desde el 16 de octubre de 2020.

Más allá de la política, la economía y las finanzas de los diferentes países productores, por cierto, cada son más los que producen y exportan vinos, el parlamento de Bruselas considera que este sector sigue sufriendo el impacto de las restricciones que se adoptan para frenar la propagación del coronavirus.

“El sector vitivinícola ha sido uno de los más afectados por la crisis del coronavirus y las correspondientes medidas de bloqueo adoptadas en toda la UE”, manifestó el comisario de Agricultura, Janusz Wojciechowski.

El cierre de restaurantes y bares en toda la UE, restricciones y cancelaciones de celebraciones, así como la rápida evolución de la demanda son algunas de las circunstancias que afectado duramente afectado al sector del vino.

Además, los aranceles estadounidenses sobre el vino de la UE han contribuido a las dificultades del mercado, limitando las exportaciones a EE.UU. en el contexto de la disputa Boeing / Airbus en la Organización Mundial del Comercio (OMC).

Adoptadas en 2020, las medidas tenían como objetivo maximizar el uso del presupuesto disponible en los programas nacionales de apoyo al vino, proporcionar ayuda financiera a los beneficiarios y minimizar los impactos negativos en los precios del mercado, y supusieron un “apoyo significativo”, destacó el comisario polaco.

La Comisión ha señalado que el objetivo de las medidas es aprovechar al máximo los fondos disponibles en el marco de los programas nacionales de apoyo al vino y ha precisado las medidas que pueden ponerse en marcha:

• Ayudas a la destilación de crisis y al almacenamiento privado y pagos adelantados. La Comisión recuerda que estas medidas permiten retirar vino del mercado limitando el impacto negativo en los precios y mejorando la liquidez de los operadores. Los Estados miembros pueden anticipar el pago de hasta el 100% de los costes, permitiéndoles utilizar totalmente los fondos de sus programas de apoyo y aliviar la presión del mercado más rápidamente.
• La UE mantendrá el incremento en su aportación a las medidas de los programas de apoyo nacionales, que puede llegar al 70%, en lugar del 50% habitual.
• Mayor flexibilidad en el marco de los programas de apoyo de forma que los Estados miembros puedan adaptarlos a sus necesidades. Entre otras cosas se flexibiliza la aplicación de la medida de vendimia en verde para controlar el potencial de producción.

“Confío en que estas medidas proporcionen rápidamente resultados concretos para el sector vitivinícola de la UE y proporcionen pronto estabilidad”, concluyó el polaco Wojciechowski.